

Tan importante es el propio ejercicio como el descanso que viene después. Tras un esfuerzo es fundamental que el cuerpo se recupere. Debemos evitar “machacar” nuestro cuerpo para no encontrarnos con el efecto contrario que esperamos: en lugar de ponernos en forma, lesionarnos y fatigarnos. Hoy el equipo de Magar´s, tu tienda online de danza y fitness, queremos hablaros sobre cómo y cuánto descansar después del ejercicio.
En el descanso no influye solo hacer ejercicio, si tu día a día es ajetreado, trabajas muchas horas, tienes hijos, una casa que atender, etc. también tienes que aprender cuándo y cómo frenar.
El descanso es necesario porque permite al cuerpo adaptar sus estructuras y funciones y, para entendernos, estos periodos de tranquilidad formarían parte del propio entrenamiento ya que es en esos momentos cuando se produce una mejora en el rendimiento.
Cuando nos ejercitamos sometemos al cuerpo a un estado de estrés. El organismo trata de sobrellevar esta situación adaptándose a la situación, cambiando sus estructuras y su entorno hormonal. El problema viene cuando estas situaciones son muy recurrentes porque el organismo se somete a un constante estado de fatiga y se produce un estrés crónico o lo que se conoce como sobreentrenamiento.
El cuerpo puede reaccionar a esto de diferentes formas: falta de sueño, cansancio, pérdida de rendimiento y de concentración, oscilación del peso de forma repentina…
¿Qué hacer para evitar esta situación?
- Dormir diariamente entre 7 y 8 horas.
- Tratar de seguir los mismos horarios de sueño.
- Entrenar en días alternos o, al menos, con un par de días de descanso.
- Podemos dedicar días de entrenamiento a practicar lo que se conoce como “descanso activo”, ejercicio suave, de baja intensidad para recuperar.
Ya lo sabes, a partir de ahora, no solo planifiques tus entrenamientos, piensa también en descansar el tiempo necesario.