

A algunas personas se les hace cuesta arriba eso de hacer deporte. En realidad, si no eres deportista profesional, hacer ejercicio no siempre es una prioridad. El día a día suele ser tan atareado que, más de una vez, lo habrás dejado “para mañana”. Pero como sabemos que el deporte es básico para tu bienestar vamos a ver cómo dejar la pereza a un lado y comprometerte con el ejercicio.
En primer lugar, vamos a buscar la motivación haciendo una recopilación de todos sus puntos buenos. El ejercicio físico nos mantiene en forma, evita muchas enfermedades, nos llena de energía y de autoestima, nos libera del estrés y, a algunos, nos ayuda a socializar. No está mal, ¿no?
Si vas al gimnasio, que esté cerca de ti
O, en su defecto, cerca de tu lugar de trabajo. Sobre todo ahora en invierno da mucha pereza llegar por fin a casa para tener que volver a salir. Así que póntelo fácil, busca un gimnasio que te pille de camino entre un sitio y otro o bien que esté cerquita de tu casa, para que no te de tiempo a arrepentirte.
Busca clases dirigidas y haz piña con tus compañeros
Se trata de encontrar una actividad que te motive, en la que tengas un monitor o monitora que te corrija y se adapte a tus progresos y con un grupo de gente para animaros mutuamente. Formar parte de un equipo, compartir éxitos y fatigas e intercambiar consejos te puede ayudar a no abandonar.
Objetivos ambiciosos, pero realistas
Esta bien que te plantees grandes metas, pero probablemente lograrlas te llevará un tiempo. No desesperes y ve avanzando poco a poco. Habrá días mejores y otros peores, lo importante es que vayas superando pequeños retos, cada uno de ellos es una victoria y un plus de motivación.
Mide tus avances
No te obsesiones con tus marcas, pero contrólalas para observar lo lejos que llegas. Tu progresión es muy importante para un compromiso mayor con tus objetivos.
Hazte con ropa cómoda y favorecedora
Como tienda de ropa deportiva, te aseguramos que las prendas con las que entrenes tienen mucho que decir en tu rutina de ejercicios. Elige ropa cómoda, que no coarte tus movimientos, que se adapte a tu cuerpo, sujete correctamente y, además, que te favorezca para que te brilles también haciendo ejercicio.
Cambia tus rutinas
Un día dentro de casa, otro en el exterior, un día pilates, otro running, un día música, otro un podcast… Hay miles de entrenamientos así que aburrirse ¡no es una opción!
Te deseamos mucha fuerza y mucho éxito en cada uno de tus objetivos deportivos.